A la hora de desarrollar un proyecto en el que se usará la tecnología de Flash, se plantea si es mejor desarrollarlo mediante la herramienta de Flex o con Flash, ambas de Adobe.
Ambas herramientas permiten obtener la misma solución, pero con diferencias respecto al desarrollo. La diferencia principal es el objetivo de la aplicación.
Flex y Flash son dos aproximaciones distintas para explotar las posibilidades de la misma máquina virtual, el Flash Player, y con diferencias importantes en sus frameworks.
Flash está orientado hacia el diseño y programación de sitios web, y Flex está orientado hacia la programación de aplicaciones de Internet enriquecidas (RIA).
Para comprender mejor en qué casos usar una herramienta u otra, se proponen dos ejemplos clarificativos: una aplicación sobre la promoción de un producto y una aplicación sobre la gestión de expedientes académicos.
Ambas herramientas obtienen las mismas soluciones, pero para el primer caso, usando Flash se obtiene menos tiempo de desarrollo, sin embargo, para el segundo caso, Flash dificulta la realización de la funcionalidad de la aplicación, resultando Flex más efectivo.